Supongo que debería haber comentado algo, pero no he tenido tiempo y, además, creo que es evidente en sí mismo:
He cambiado (otra vez) la apariencia del blog.
Esta vez es solo un cambio de aspecto, el layout sigue exactamente igual, solo he tenido que tocar un poco la hoja de estilo.
Pues eso. Psicofónías, un poco a lo Art Nouveau.
Hoy estoy generoso.
Te ofrezco nada más y nada menos que la oportunidad de llevarte un Micro-Psicobyte-Special a casa.
Si, amigo. Desde hoy mismo y hasta el fín de nuestras existencias, puedes disfrutar del jugete de este verano, el Micro-Psicobyte-Special, tan solo con seguir estas simples instrucciones:
Descarga inmediatamente la exclusiva plantilla recortable del Micro-Psicobyte-Special en formato PDF.
Imprimela en blanco y negro o, si quieres disponer de un exclusivo Micro-Psicobyte-Special POLICROMO, hazlo en color.
Pega la hoja impresa sobre una cartulina resistente.
Recorta las piezas de tu fantástico Micro-Psicobyte-Special con unas tijeras, cutter, navaja, rayo laser u otro instrumento al efecto (Advertencia: No Te Cortes. No me hago responsable de los daños derivados del uso inadecuado de tu Micro-Psicobyte-Special).
Une las piezas por los puntos rojos, de forma que puedan pivotar en torno a esos ejes (No olvides que los brazos son las extremidades superiores y las piernas son las inferiores). Puedes usar, por ejemplo, chinchetas dobladas, corchetes, etc ¡Usa tu imaginación: Micro-Psicobyte-Special también es educativo!
Une con un hilo resistente los puntos verdes, tal y como se ve en la imagen de al lado.
Y ya solo tienes que colgar tu Micro-Psicobyte-Special de donde quieras y tirar de la anilla inferior: ¡Tu Micro-Psicobyte-Special se moverá de un modo estúpido y predecible!
Puedes utilizar lápices de colores, ceras, rotuladores, etc para personalizar tu Micro-Psicobyte-Special a tu gusto.
Puedes ponerlo en tu habitación, en una ventana, usarlo para sustituir ese estúpido Elvis o ese ridículo atrapasueños que tienes en el espejo retrovisor, puede ser un mágnífico regalo...
No pierdas ahora esta oportunidad única de disfrutar completamente gratis de horas y horas de diversión con tu fantástico Micro-Psicobyte-Special.
Hala, a disfrutarlo.
El pasado viernes recibí un mensaje enviado desde el formulario que, a tal efecto, tengo puesto en mi página personal.
El mensaje estaba firmado por un tal Germán, a quién no conozco de nada, y empezaba con la escueta frase "Creo que tengo que agradecerte algo".
Hasta aquí, todo normal.
Si, normal.
Verás: Estoy tan pagado de mí mismo que no me sorprende que la gente me agradezca cosas. Y, sobre todo por mi página de "Edición Extremadamente Simple de HTML", estoy bastante acostumbrado a recibir cartas de agradecimiento.
Pero esta era distinta.
El mensaje era largo y, pese a que tengo la autorización expresa del autor, cierto prurito de vergüenza me impide reproducirla al completo, pero podría resumirse en uno de sus párrafos:
Vivo en una nube, es gracias a tu blog, gracias a él he encontrado a la mujer de mi vida, esto es la primera vez que me pasa, es la primera vez que hago algo así pero sé que es verdad y que va a salir bien.
Vale. Soy un hombre de mundo y, como ya he dicho, bastante pagado de mí mismo. Pero esto si que no lo esperaba.
Para no darle a esto más intriga, te cuento:
El pasado 11 de Marzo fueron perpetrados los atentados que ya conoces.
Al principio, yo no pensaba escribir nada al respecto porque ¿Que se puede decir a eso?
Pero entonces, por accidente, dí a parar al blog de Ari014, una chica que se había librado de la tragedia por tan solo unos minutos.
Y fué a raiz de ese descubrimiento quee escribí un artículo al respecto.
Resulta que el tal Germán, que dice ser habitual de este blog, leyó mi post, siguió el enlace, se interesó por la autora y comenzó una relacción electro-epsitolar con Ari014.
Y, el viernes en cuestión, habían decidido dar el paso al mundo atómico: Conocerse personalmente.
Y de ahí el agradecimiento de Germán.
Habrás notado, con tu habitual agilidad mental, que lo de "gracias a tu blog" es bastante relativo: El enlace que Germán pulsó solo fué un nexo, tan necesario e importante para su futuro como el enchufe de su ordenador o la puntualidad del autobús que le lleve a su anhelada cita.
Supongo que hago notar este hecho porque, al leer su correo, siento cierta especie de (inmotivada) responsabilidad sobre esa relacción.
En cualquier caso también siento un (inmotivado) placentero orgullo por mi casual labor de celestina.
En realidad, si nos paramos a mirar, nuestras vidas son solo un cúmulo de improbables casualidades. Uno de entre miles de espermatozoides tuvo la inesperada fortuna de atravesar la membrana de un óvulo, y eso dió comienzo a mi vida. Y, desde entonces, cada instante ha sido necesario para que yo esté en este momento aquí, escribiendo este artículo.
De todos modos, les deseo lo mejor a Germán y a Ari01. Que os vaya muy bién.
En el momento cumbre de la película de 1965 "La batalla de las colinas del whisky", durante una tormenta de polvo, confluyen en un lugar indefinido la caballería de los Estados Unidos de América, los indios, un batallón de mineros borrachos, el Ejercito de Salvación y una caravana con un cargamento de licor.
Es una escena muy divertida que me ha venido a la mente por lo siguiente:
Iker Jimenez, que es una espécie de émulo del J.J. Benítez, ha organizado desde su programa de radio en la cadena SER una alerta ovni al estilo de las de los años 80 para el próxino día 25.
Para quién no lo sepa, una alerta ovni consiste en salir una noche con un montón de creyentes en los ovnis, ponerse a mirar al cielo, y creer que cada luz o cosa extraña que se ve es una nave espacial alienígena o algo por el estilo.
Supongo que cada cual se divierte como quiere.
En cualquier caso, a muchos no les parece serio que una cadena de radio de prestigo se preste a este tipo de estupideces, y han protestado públicamente.
Por otro lado, un grupo de "incrédulos" ha organizado un proyecto en el que, esa misma noche, piensan crear falsos ovnis para los "crédulos", con la excusa de investigar cómo se deforman las percepciones y los testimonios de los testigos de estos casos.
Ni que decir tiene que lo ufólogos han considerado esto una especie de sabotaje.
Pero la cosa continúa, porque lo de la SER, buscando apoyos que den algo de prestigio y apariencia de seriedad a su montaje, se han dedicado a buscar a astrónomos, astrofísicos y gente similar para que participen con ellos esa noche.
Lo malo es que, cuando les explicaban para qué les invitaban, hablaban de observaciones del cielo, de estrellas...
Pero olvidaban comentarles lo de los ovnis (Lo que parece natural, porque si les das esa clase de detalles, seguro que no quieren participar).
El caso es que esta "pequeña" omisión ha hecho que, caundo han descubierto de qué iba de verdad todo eso, algunos de esos astrónomos y astrofísicos se sientan estafados y se cabreen muchísimo.
Pero sigo: Porque el Museo de la Ciencia de Castilla - La Mancha ya tenía prevista una jornada de observación para esa noche. pero, evidentemente, no para buscar ovnis. Y pese a que los ufúlogos han intentado hacer creer que esta observación forma parte de su alerta ovni, los del Museo de la Ciencia dicen que nanay, que a ellos no los metan en ese saco, que tienen su dignidad. Supongo que, si se les aparece un ovni, lo mirarán encantados. Pero su plan es ver estrellas y esas cosas.
Y los de la Red de Investigación Sobre Bólidos y Meteoritos, que son unos tipos que se dedican a poner sus cámaras durante toda la noche a fotografíar todo aquello que se mueva en el cielo, supongo que para evitar que les confundan con los ufólogos, han tratado de dejar clara y por escrito su opinión de todo este circo.De modo que la noche del próximo 25 va a haber por ahí, mirando al cielo, varios grupos de ufólogos que verán montones de ovnis, otros grupos de astrónomos (aficionados y profesionales) que miranrán estrellas y planetas, otros de fabricantes de ovnis que elevarán globos con linternas y esas cosas, pseudoperiodostas que buscarán carnaza entre los crédulos, cazadores de meteoritos...
No sé, pero a mí me ha recordado a "La batalla de las colinas del whisky".
Gracias a la generosidad de J.J. Merelo tengo una cuenta de GMail.
O sea: Que ahora tengo una cuenta gratuíta en la que puedo recibir hasta un GigaByte de spam.
Mola.